Los tornillos para implantología permiten un anclaje sólido y seguro entre la mandíbula y el metal.
Para realizar una osteointegración correcta, la superficie del tornillo debe tener una rugosidad controlada.
Además, los tornillos para implantes dentales deben cumplir altos estándares de calidad, biocompatibilidad, higiene y seguridad. El cliente utiliza tanto acero inoxidable como titanio.
El cliente nos ha pedido un único sistema especial automático para tratar tanto componentes de acero inoxidable como de titanio.
La máquina debe garantizar la continuidad y la repetitividad del proceso, que debe cumplir las normativas internacionales y los estándares de biocompatibilidad.
Se ha creado un sistema compacto para adaptarse al área de producción del cliente.
Basándonos en nuestra experiencia en el sector biomédico, hemos construido una máquina especial dedicada al sector de la implantología que respeta todos los estándares internacionales de biocompatibilidad. Todos los materiales del sistema (carpintería, componentes, revestimientos) son trazables. El acero inoxidable está certificado y la máquina garantiza que el producto no esté contaminado.
El proceso de rugosidad controlada se produce gracias a automatizaciones y garantiza un resultado medible y repetible. La conformación peculiar de los componentes del sector dental precisa un sistema especial que controle de manera rigurosa todos los parámetros del proceso. Hemos creado un sistema de cribado automático para mantener constante el valor del gránulo y garantizar el perfil de la pieza después de cientos de ciclos. El propulsor puede gestionar granulometrías diferentes en el mismo ciclo.
Además, la máquina puede utilizar de forma alterna materiales diferentes sin contaminarlos. Se pueden utilizar productos componentes para prótesis de acero inoxidable o titanio sin interferencias.
El cliente ha aumentado la productividad y ha obtenido tiempos de producción seguros gracias al sistema automático. Con una única máquina especial puede gestionar componentes de materiales diferentes.
La repetitividad del proceso se garantiza por las automatizaciones, que pueden gestionar los parámetros de elaboración configurados por el operador.
Gracias a la experiencia en el sector biomédico, certificada por el suministro de máquinas a las principales empresas del sector, el cliente ha podido comprar una máquina que respeta todos los estándares de biocompatibilidad.
Norblast ha suministrado el sistema y se ha ocupado de toda la documentación necesaria para certificar el cumplimiento de las normas internacionales.
